Disfunción Eréctil por Insuficiencia Arterial Tratamiento
Para tratar eficazmente la disfunción eréctil (DE), es fundamental abordar los problemas subyacentes, como la hipertensión arterial. Algunas personas pueden controlar y reducir con éxito su hipertensión únicamente mediante ajustes en el estilo de vida, mientras que otras pueden necesitar intervenciones adicionales.
La disfunción eréctil vasculógena puede abordarse con varios tratamientos, y uno de los más comunes son los inhibidores de la fosfodiesterasa de tipo 5, como Viagra, Cialis, Levitra y Stendra. Estos medicamentos suelen tomarse en forma de pastillas y actúan aumentando el flujo sanguíneo al pene.
La testosterona desempeña un papel fundamental en la función sexual. Si los análisis de sangre revelan niveles bajos de testosterona, puede prescribirse una terapia de testosterona. Este tratamiento tiene como objetivo restablecer los niveles de la hormona y, en consecuencia, mejorar la función sexual.
Los recientes avances en técnicas y tecnologías endovasculares han hecho posible revascularizar arterias peneanas de pequeño calibre (1-2 mm de media) e IPA (2-3 mm). Un estudio realizado en 2021 por TD Wang puso de relieve que el tratamiento endovascular de la disfunción eréctil relacionada con la insuficiencia arterial pélvica es seguro y eficaz para los pacientes. Este hallazgo subraya la importancia de abordar la salud arterial en el contexto de la disfunción eréctil.
Una investigación realizada por L Peşkircioğlu en 1996, que ha sido citada 13 veces, apunta al potencial de la pentoxifilina en el tratamiento de la DE. El estudio encontró que este medicamento fue bien tolerado y podría mejorar el flujo arterial peneano. Esta mejora se observó objetivamente como un aumento del PSV en la ultrasonografía dúplex del pene.
Históricamente, se creía que la acumulación de placas en las arterias (aterosclerosis) estaba estrechamente relacionada con la disfunción eréctil. Estas obstrucciones pueden dificultar el flujo sanguíneo, que es esencial para lograr y mantener una erección. Comprender y tratar estos problemas arteriales puede desempeñar un papel importante en el tratamiento de la disfunción eréctil.
Tanto la arteriopatía periférica como la disfunción eréctil son tratables, sobre todo cuando se diagnostican a tiempo.
El tratamiento de la arteriopatía periférica también puede aliviar la disfunción eréctil al garantizar un flujo sanguíneo adecuado.
Como señalaron los USA Vascular Centers en abril de 2021, los especialistas pueden tratar tanto la arteriopatía periférica como la disfunción eréctil con un procedimiento ambulatorio no quirúrgico conocido como angioplastia con stent.
Desde la introducción de la inyección intracavernosa de agentes vasoactivos, fármacos como la papaverina, la fentolamina y el alprostadil se han utilizado ampliamente en el diagnóstico y tratamiento de la disfunción eréctil vascular. Estos medicamentos pueden aumentar el flujo arterial y reducir el flujo venoso, proporcionando un posible remedio para la disfunción eréctil.
Para los varones jóvenes con disfunción eréctil debida a factores congénitos o como resultado de un traumatismo pélvico o perineal, la cirugía vascular presenta una posible cura. Este procedimiento pretende rectificar los problemas vasculares que causan la disfunción, ofreciendo una solución más permanente que otros tratamientos.
La incorporación de los datos enumerados y la comprensión de los distintos tratamientos disponibles pueden ayudar a las personas a tomar decisiones informadas sobre su salud y a abordar la disfunción eréctil de forma eficaz.